El nuevo técnico del FC Barcelona, Xavi Hernández, ha concedido una entrevista a Barça TV antes de firmar su nuevo contrato, de ser presentado oficialmente ante la afición barcelonista en el Camp Nou y de comparecer en rueda de prensa ante los medios de comunicación.
«Es un sueño hecho realidad. Vuelvo con la máxima responsabilidad de ser el entrenador del primer equipo, hay que trabajar y poner orden. El desgaste será tremendo y la presión muy bestia. El objetivo es reflotar la nave del barcelonismo, disfrutar y ganar. El Barça es mi casa y tengo muchas ganas de afrontar este reto. Es un momento delicado en lo económico y deportivo, pero estoy preparado, junto a mi staff», ha explicado Xavi Hernández.
Los retos no le asustan y así lo ha expresado. «Me gustan los retos, soy un persona muy competitiva. No podría estar en un sitio mejor. Todos hemos puesto de nuestra parte para que esto se concretase. Tendré tiempo para trabajar y hay equipo para lograr grandes cosas».
A la tercera fue la vencida y Xavi explicó por qué dijo ‘no’ al Barça dos veces anteriormente, asegurando que «me vinieron a buscar dos veces y, entonces, pensé que era pronto. Me he podido preparar como entrenador y ahora estoy preparado; es el reto más grande de mi carrera», ha afirmado, añadiendo la importancia que tiene para su familia este día. «Toda mi familia es muy culé y para ellos también es un sueño. Es momento de disfrutar de los entrenamientos y de los partidos. El objetivo es luchar por todos los títulos. Hoy es el cumpleaños de mi mujer, imagínate qué regalo, nos ha cambiado la vida», comenta.
El ADN no se toca
Regresa al Camp Nou tras despedirse como jugador en 2015, tras 17 temporadas en el primer equipo. «Mi ADN Barça no ha cambiado: quiero tener la pelota siempre, la idea se mantiene, apretar arriba, tener un Barça alegre e intenso; tenemos que recuperar muchas cosas. Hay equipo y una generación de jóvenes que sube con mucha fuerza», ha dicho.
Lo dará todo por el club de su vida, al que llegó como un niño, se fue como una leyenda y regresa como el hijo pródigo. «Me dejaré la piel, tengo muchas ganas de entrar en el vestidor, hablar con ellos y exigirles lo máximo. Soy un culé más y todos nos tenemos que ilusionar. Se trata de tener rendimiento inmediato, no hay margen, el calendario es muy bestia», comenta. Su debut será en el Camp Nou ante el Espanyol en el derbi catalán el próximo sábado 20 de noviembre.
Xavi conoce como nadie el club y para él es una ventaja, igual que volver a coincidir con algunos de sus excompañeros. «Es una ventaja conocer al club para saber qué les puede pasar por la cabeza a los jugadores. Sé de la exigencia y de las críticas que tendré. Hay que olvidar los ‘ismos’ y tenemos que remar en la misma dirección todos, porque la situación es complicada y debemos ir todos a una. Mi primer mensaje como entrenador es que estoy para ayudarlos. Les exigiré mucho también. Es una ventaja conocer a Busquets, Piqué, Sergi Roberto, Jordi Alba y Ter Stegen. Sé dónde les debo apretar y los puntos débiles que pueden tener. Es una ventaja, igual que también lo fue en el Al-Sadd».
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